Creo que no os descubro nada nuevo a estas alturas si os digo que la piel también ha de exfoliarse en invierno, pero no está de más recordarlo. Aunque esté menos expuesta que en verano lo cierto es que con la bajada de las temperaturas la piel se seca y aun así debemos exfoliarla. En esta época del año la piel pierde agua ya que la humedad del ambiente disminuye a causa de las calefacciones, además después de todos los excesos navideños y con todos los propósitos de año nuevo me parece un buen punto de partida el empezar cogiendo el hábito de la exfoliación por lo menos una vez por semana.
¿Por qué es conveniente exfoliar?
Porque si no retiramos las células muertas e impurezas, la capacidad cutánea de absorción de la piel queda reducida y aumenta la sequedad, lo que provoca tirantez y falta de luminosidad.
Una vez que se retiran las células muertas se favorece la oxigenación celular y la piel respira mejor, absorbiendo todos los nutrientes de la crema hidratante que apliquemos después.
Por eso es muy importante no olvidar hidratar después de exfoliar, insistiendo en esas zonas que tenemos más olvidadas como los codos o los pies.
En esta época de bajas temperaturas una buena opción puede ser usar mantecas corporales en vez de leches corporales, ya que las primeras tienen texturas más untuosas y por lo tanto hidratan más y mejor.
¿Con que frecuencia debemos exfoliarnos?
Con una vez a la semana es más que suficiente pero todo dependerá de nuestro tipo de piel.
En pieles secas y mixtas una vez a la semana, en pieles sensibles y finas mejor hacerlo cada quince días y en pieles grasas (sin acné) se puede hacer hasta dos veces por semana.
¿Cuál es la mejor forma de hacerlo?
Siempre en movimientos circulares y ascendentes (de abajo hacia arriba) sobre la piel previamente humedecida por eso podemos aprovechar en la ducha ya que con el agua caliente, el poro se abrirá y nos facilitará mucho la labor.
¿Puedo usar el mismo producto en la cara y en el cuerpo?
Un NO rotundo, ya que la piel del rostro es más fina y delicada que la del cuerpo por lo tanto debemos usar un producto específico para cada zona, un exfoliante facial para la cara y los labios (no hay que olvidarnos de éstos últimos) y un exfoliante corporal para el resto del cuerpo, ya que el tamaño del grano no es igual, para el cuerpo es más grueso y para la cara es más pequeño.
Y ya para terminar me gustaría saber vuestra opinión acerca de la exfoliación y si lo hacéis habitualmente y sobre todo ¿cuáles son vuestros propósitos beauty para este año?
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